Historia del Teatro Romano

Construido bajo la ladera en la cual se encuentra la imponente Alcazaba, tal como construían los griegos este tipo de recintos, estamos ante un complejo del Siglo I D.C. durante el mandato de Augusto.

Hay que tener en cuenta que se construían de esta manera porque se aprovechaba la acústica de dicha ladera para que la reverberación fuese lo más efectiva posible durante los espectáculos.

 Dicho teatro fue enriqueciéndose a nivel arquitectónico durante los dos siglos siguientes por mecenas que, con su labor filantrópica, buscaban favores políticos en una Malaka romana no muy populosa, pues hay que entender que esta construcción es de tipo medio en comparación con grandes Teatros Romanos de su centuria.

Decorado con acabados en mármol  en su cávea inma como en la cávea media, y piedra caliza de origen marino, sugiere que este ultimo material procedia de las canteras de Torremolinos, , y que los mármoles venían, por contrapartida, del Peloponeso, Alicante, Egipto o Almería entre otros lugares.

 

Graderío del Teatro Romano de Málaga

El abandono del Teatro

Desde el Siglo III D.C. el Teatro Romano cae en desuso en cuanto a su función pública y como lugar de espectáculo.

Durante los siglos pertenecientes al legado musulmán, los regentes espolearon materiales y decoraciones corintias para adaptarlo a la Alcazaba como elementos decorativos, y el uso del teatro estaba destinado a otro tipo de funciones.

Más tarde, el Cristianismo dejaba su uso en un stand by, eliminando todo rastro de costumbres romanas, pero se dejó en pie bajo el capítulo LXII de la Lex Flavia Malacitana que prohibía derribar este tipo de templos.

Por culminar su entierro, varios desbordes del Arroyo Calvario terminarían de sepultar el recinto, llevándolo al olvido.

Descubrimiento del Teatro Romano de Málaga

En 1951, durante las obras del Palacio de Archivos, Bibliotecas y Museos que tenía lugar en plena Calle Alcazabilla, justo en la zona de la scanea o escenario del Teatro Romano, se produce el hallazgo de los primeros restos.

Se encontró el graderío de la cávea y el aditus maximus, para quienes no sabemos Latín, el pasadizo que desemboca a la Orchestra y la zona baja donde se sentaban las castas más altas.

En 1994 se procede al derribo del edificio del archivo y en años posteriores se procede a terminar las mejoras proyectadas a mediados del Siglo XX por Don Juan Temboury y Sorolla Pons, con la rehabilitación de las escalinatas, la aplicación de materiales distintos para la zona alta de la cávea, y en 2002, procediendo a la instalación de la pasarela que lleva a la scanea y al proscaenium, desde la cual se pueden ver las piletas de Garum que son seña de la ciudad.

Hoy en día el Teatro Romano se puede visitar de forma gratuita, accediendo, o bien desde La Alcazaba a la cávea, o bien desde el centro de Interpretación de este, donde puedes ver restos históricos, así como documentos de su rehabilitación.

En nuestra Ruta por la Historia de Málaga te contamos estas y muchas cosas del recinto al principio de nuestra visita guiada, la cual comienza en Calle Alcazabilla.